Es una maravilla comprobar como la luz es un elemento más de la Sagrada Familia, como las columnas y el resto de símbolos y estructuras. Sobre las 10 de la mañana la luz que entra por la fachada principal ilumina el altar mayor, aunque supongo que es porque esta fachada está inacabada. Es sólo un ratito, pero vale la pena verlo. Por la tarde es la luz de colores que atraviesa las vidrieras de las capillas de detrás.