Si comentaba días atrás que los figurantes de las contradas debían pasar calor bajo tan gruesas vestiduras, no me imagino lo que debe ser bajo este metal bañado con un radiante sol de agosto.
---
Siena, Toscana (Italia).
sábado, 2 de febrero de 2013
Cocido
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La cara de ese señor ya lo dice todo. Espero que no estuviese mucho tiempo porque se iba a freir. Un saludo.
ResponderEliminar