Cuenta la leyenda que la gente estaba aterrorizada por el avance de la lava de la erupción del volcán Timanfaya en 1730. En 1735 rogaron a la Virgen de los Dolores que hiciera algo. Y las súplicas de los campesinos debieron ser escuchadas, porque la lava se detuvo, y en el lugar donde lo hizo se alzó una cruz de madera y se erigió una ermita en honor a la virgen que los salvó. Al fondo el volcán Montaña Tinache.
---
Mancha Blanca, Lanzarote.
[EXIF]
miércoles, 8 de julio de 2015
El lugar donde se detuvo el fuego
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario